- Mayo

MAYO

Meditación – La prosperidad

Quisiera compartir contigo un texto bíblico que se encuentra registrado en el libro de Santiago 4:17 que nos aconseja diciendo Vsc. 17 “Y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado”

Querido amigo si tú no aceptas la idea de que mereces prosperar, entonces, aun cuando los dones te lluevan, encontraras la manera de rechazarlo. Por ejemplo:

Un hombre estaba trabajando para aumentar su prosperidad, y una noche llego a la casa de unos amigos emocionado porque acababa de ganar 1,000.00 de dólares.

- ¡No lo puedo creer! – repetía el. – ¡Es que yo nunca gano nada!

Todos los que lo escuchaban sabían que aquello era el reflejo de lo que el creía de si mismo, Sus amigos lo alentaron y le dijeron que debía usar ese dinero de la mejor manera, pero aun así el seguía sintiendo que en realidad no se lo merecía, y con este pensamiento no disfrutaba del premio ganado. La semana siguiente no pudo asistir a una reunión con sus amigos por que se había roto una pierna y las facturas que tubo que pagar por atención medica ascendieron a lo que se había ganado quedando así más endeudado.

Saben como el personaje de esta historia existen muchas personas, este hombre había tenido miedo de avanzar por una nueva senda de prosperidad, y sentía que no se lo merecía, se había castigado de esa manera.

Es por eso que debes tener presente que aquello en lo que tu te concentres es lo que aumentara el estilo de vida que tu elijas vivir, de modo que no te concentres en las cuentas que tienes que pagar o en los problemas que te rodean ya que si solo te concentras en la estrechez y las deudas, generaras más estrechez y mas deudas.

Pero la buena noticia es que ante Dios hay una provisión inagotable, empieza a darte cuenta de eso. Te invito a que te tomes tu tiempo para contar las estrellas en una noche despejada, o los granos de arena que caben en un puñado, las hojas que hay en una rama de un árbol, las gotas de lluvia que resbalan por el cristal de la ventana o las semillas de un tomate. Cada semilla es capaz de producir una planta completa, con una infinidad de tomates.

Dedica un tiempo para ser agradecido por lo que tienes, y ya vas a ver como aumentara. Dedica un momento para reconocer que todo lo que posees actualmente desde la vida, el hogar, el aire que respiras, el agua, la luz, el teléfono, la ropa, el auto…, el dinero que tienes mucho o poco, los amigos tu capacidad para ver, sentir, tocar, caminar y disfrutar de cada cosa de este mundo increíble es porque Dios te lo ha dado.

Lamentablemente al ser humano lo que lo limita es su propia creencia en las carencias y limitaciones. A ti ¿Qué creencia te esta limitando? .no rechaces la prosperidad y las hermosas bendiciones que Dios desea darte. Pero sobre todo sonríe y se agradecido reconociendo que todo lo que tienes son dones, regalos que Dios te da… y lo mejor que tu puedes hacer es reconocer que lo mereces y…Utilizalos.

Dios te bendiga!!! Y nos ayude a siempre ser agradecidos a el.

Meditación – “No es oro todo lo que reluce”

Una vez más los quiero invitar a abrir nuestra Biblia y así juntos buscar en el libro de 1ra de Juan 3:1 las siguientes Palabras. “Mirad cual amor nos ha dado el padre, para que seamos llamados hijos de Dios”.

Carolina es una bella joven de ojos oscuros, bonitos y vivaces. A los 14 años es popular tanto entre los jóvenes como entre las muchachas. Viste siempre de última moda y tiene abundancia de dinero para gastar. Como ambos padres son abogados, Carolina tiene de todo excepto el amor, el tiempo y la atención de ellos. No le han puesto restricciones respecto de la hora en que debe regresar a casa después de una cita. A veces llega después de la media noche, y una noche llego a las 5:00 de la madrugada. Nadie dijo una palabra. En realidad nadie pareció siquiera haberlo notado.

Sea cual fuere la persona con quien ella tenga una cita, esta bien a lo que sus padres se refieren. Sencillamente no tienen tiempo para que se los moleste. A menudo carolina llora hasta dormirse, porque se siente sola. Necesita desesperadamente de sus amigos de la escuela, ya que ellos son realmente su familia. Cuando sus amigos la invitaron a salir hasta tarde, al regresar ella pensó que sus padres dirían o harían algo; cualquier cosa que diera a entender que les interesaba saber que le había sucedido. Pero no lo hicieron. Carolina una noche más, lloro como si su corazón fuera a estallar. Realmente una vez más como tantas otras parecería que a nadie le importaba.

Al reflexionar en estas palabras me hace pensar que quizás esta sea la historia de muchos jóvenes que nos están escuchando en esta tarde, jóvenes que lo tienen todo pero no tienen lo más importante, el consejo y apoyo de sus padres… Pero si tu en esta tarde sientes que esta no solo es la historia de Carolina, porque estas pasando por la misma situación te invito a centrar tu atención en el versículo citado al principio, teniendo la seguridad que el amor de Dios es tan alto como los cielos y tan abarcante como la eternidad, y el amor de Dios esta disponible para ti en este momento simplemente por ser llamado hijo de Dios.

Querido amigo/a, jóvenes… quizás eres uno de los muchos que creen que deben “vivir la vida” y así llamar la atención, pero recuerda que se avecinan tiempos difíciles, y que lo que has sembrado, eso segaras, cosecharas dolor y cuando pasen esos momentos que considerabas buenos, descubrirás que el tomar malas decisiones, es por demás amargo y quizás hasta te encontraras más solo que al principio. Pero cuando aceptas el llamado de Dios como tu padre, puedes tener la seguridad que ninguna helada marchitara la cosecha, ninguna tormenta la destrozara, ninguna plaga la destruirá; tienes la seguridad de que si Jesús es tu padre todas, pero todas las cosas que emprendas te ayudaran para bien.

Así como un padre da la vida a su hijo, cada respiración que damos es una evidencia del poder divino de nuestro padre celestial.

Saben había una cosa que Carolina no sabia y es que aunque sus padres se olviden de ella, hay alguien, que nunca pero nunca se iba a olvidar que allí estaba ella, sufriendo, necesitada de un poco de atención y amor, lo que la joven de nuestra historia no sabia es que había alguien que estaba dispuesto a escucharla así como también esta dispuesto a escucharnos a cada uno de nosotros si tan solo acudimos a Él… Hoy al igual que Carolina nosotros podemos decirle a Dios simplemente esto “Padre como estas, tantas cosas tengo para hablar contigo… hace tiempo que he esperado la oportunidad de estar a tu lado y poder conversar, padre estoy cansada, estoy cansado de luchar y no tengo fuerzas para andar, esta vida que no ofrece más que soledad, y Yo que me eh caído tantas veces sin poderme levantar, dependí de mis fuerzas y hoy reconozco que no hice bien, tu sabes que creí ver el camino con claridad; cuando en realidad se que ciega estoy, sabes mil preguntas me envuelven y no encuentro solución, querido padre mis problemas nublan hoy mi corazón, padre dime como hacer para saber que decisión tomar entre tanta confusión, necesito un consejo una palabra, una razón para luchar, padre te lo pido una vez más…

Si tan solo estas son tus palabras podrás escuchar la voz de Dios en este momento hablando a tu corazón y pronunciando de sus labios las siguientes palabras… “Hijo… te puedo escuchar antes de que empieces hablar, si supieras cuanto sufro cuando te veo llorar, sin poderte consolar y hasta quizás al andar a veces hallas llegado a pensar que podría abandonarte cuando más cansado estas de luchar, quiero que sepas que entre esos dos pares de huellas que dejamos al andar, hubo uno que en un momento se borro, es que no te has dado cuenta que en tus horas de aflicción en mis brazos te tome y te levante, hijo aunque sientas que te ahogas en un ancho mar, nunca dudes que te puedo rescatar, simplemente fija tu mirada en mi y te podré ayudar sobre el mar a caminar… No te rindas nunca es tarde para volver a empezar, tu padre aquí estará… tu padre te amara…

Jóvenes hagan de Dios lo supremo, busquen refugio en Dios. Acojan en su corazón a Dios como su padre, recuerda no importa donde estemos, en que situación nos podamos encontrar en este momento por que tu y yo nada podemos hacer sin Él, pero con él “podemos hacer todas las cosas”. Por que el es Dios todopoderoso, el padre eterno, el príncipe de paz. Es invencible, y los que somos considerados sus hijos seremos sin lugar a dudas por siempre, más que vencedores

Meditación – Saber perdonar

Los invito a que juntos podamos abrir nuestra Biblia para compartir así la meditación, vamos a buscar en el libro de Mateo vers. 18 Cáp.21 y 22.

Donde dice lo siguiente: “Cierto día Pedro se acerco a Jesús y le pregunto: ¿Señor cuantas veces tengo que perdonar a mi hermano que peca contra mi? ¿Hasta siete veces?- no te digo que hasta siete veces, sino has setenta veces siete- le contesto Jesús.

Una mujer se encontraba gravemente enferma. Y junto con sus dolores, revelaba tener una gran ansiedad. La enfermera al ver lo intranquila que estaba la paciente le pregunto que le ocurría. Entonces la enferma explico que no tenia paz en su conciencia porque estaba enemistada con una de sus vecinas, con la cual deseaba reconciliarse antes de morir.

La vecina fue llamada y se efectuó la dulce reconciliación. Luego mientras la señora se despedía con visible emoción, la enferma alcanzo a decirle: “Pero sepa que si no me muero quedamos como antes, eh”

Seguramente te sorprendiste y hasta te causo risa la reacción de esta mujer. Pero si nos ponemos a pensar cuantas veces, consiente e inconscientemente, nosotros adoptamos actitudes parecidas, pretendemos arreglar nuestras enemistades, y sin embargo a menudo seguimos alimentando rencor y resentimiento; Cuantas amistades se rompen cada día porque el amor propio y el orgullo impiden pedir y dar el perdón…

Piensa ¿alguna vez no te sentiste victima de las ofensas ajenas?, que te pareció imposible poder perdonar… seguramente que si, pero en cualquiera de los casos aun buscando egoístamente nuestro bien te pregunto ¿No te conviene mucho más perdonar y olvidar la ofensa recibida? Porque si tú no aprendes a perdonar, puedes tener la seguridad que tarde o temprano la amargura y el rencor terminaran por destruirte.

Con mucha razón Jesús enseño a perdonar hasta setenta veces siete, como leímos al principio, es decir tú y yo debemos a prender a perdonar sin limitaciones y con un corazón generoso ya que si deseamos ser perdonados es nuestro deber saber perdonar a nuestros semejantes.

Querido amigo/a quizás tu estas pensando que difícil es aprender esta lección de bondad y perdón… Ahora reflexione ¿Es usted amplio en perdonar? ¿Tiene usted un espíritu dispuesto a olvidar las ofensas recibidas?

Tengamos en cuenta cuantos podrían evitarse enfermedades en su propia vida, o retardar el día de su muerte, si supieran perdonar; Quizás se librarían de muchas neurosis, y aprenderían a disfrutar más de la vida al ocuparse más en la felicidad de sus semejantes… ya que en todo lugar, en el hogar, en el taller, en la oficina, en el aula o quizás en la calle, la necesidad del ser humano nos puede dar la oportunidad de no hacer con otros lo que hicieron con nosotros, pudiendo así brindar calor humano y ayuda fraterna. Con esta ventaja: de que el que da también recibe.

Recuerda simplemente que es sembrando en el terreno ajeno como cosechamos en el nuestro propio. Es procurando la felicidad de otras personas como encontramos también la nuestra. Es compartiendo el bien y perdonando al prójimo como recibimos copiosas bendiciones del altísimo. ¿Crees tú en esto? Entonces no lo dudes y hazlo. ¿Por qué cuantas veces tenemos que perdonar a nuestro hermano a nuestro amigo que nos ofende, que nos lastima? Solo siete veces’. No, te dice hoy Jesús, no solo siete veces, sino setenta veces siete.

Meditación – “Somos únicos e importantes”

Te invito a abrir la palabra de Dios, la Biblia en el libro de Isaías 43:4 que dice “Porque a mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable, y Yo te ame; daré pues, hombres por ti, y naciones por tu vida.”

Se cuenta que durante la 1era. Guerra mundial un famoso soldado británico llamado Leroi, cabalgaba con un grupo de árabes, a través del desierto, en medio de una tempestad de arena y bajo intenso calor. De repente un árabe noto que estaba faltando uno de sus compañeros.

- ¿Dónde esta Luis? – grito.

En aquel momento, todos miraron hacía atrás y notaron que el camello de ese hombre proseguía el viaje solo. Luis vencido por el calor y la incomodidad del largo trayecto, cayo del animal, había quedado muy atrás sujeto a las dificultades del desierto, y se había entregado a la muerte.

Uno de los miembros de la caravana indiferente dijo:

* Luis no es muy valioso para el grupo; dejémoslo atrás.

Pero Leroi, por el contrario, jamás dejaría que algún integrante de su grupo pereciera por falta de auxilio. Para espanto de todos, Dio media vuelta, y fue a buscar a su compañero que era muy importante al igual que los otros. Este valiente soldado retrocedió hasta encontrar a su compañero enterrado en la arena que estaba muriendo de sed y calor, le ofreció agua y así el pobre hombre recobro el ánimo, y finalmente para asombro de muchos, Luis, retomando fuerzas gracias a la ayuda del valiente soldado fue conducido de regreso a la caravana de la que formaba parte.

Querido amigo/a si reflexionamos en este hecho podríamos decir; si para este soldado su compañero era tan importante, al punto que estuvo dispuesto a exponer su propia vida en el desierto para rescatarlo, ¿cuanto más importante somos para Dios?, Alguna vez te “hiciste esa pregunta”

En primer lugar tú eres importante ante Dios porque fuiste creado a su imagen. Ni tú ni yo fuimos creados de otra manera, o de alguna cosa. Fuimos creados a imagen y semejanza de Dios, la Biblia nos da la prueba y “es que somos únicos”. Sos único con el estilo que tienes, con la manera de ser que tienes, con el color de cabello que tienes, con los ojos que tienes, hasta puede haber alguien semejante a ti en todas esas formas externas; pero no existe otra persona igual a ti entre las miles de millones que existen en el mundo.

Somos únicos, creados por Dios de esta manera. Y si reflexionamos en estas palabras podemos decir que somos únicos porque somos importantes ante los ojos de Dios.

En segundo lugar sos importante para Dios porque Jesús murió por ti en la cruz del calvario, o sea como el soldado de esta historia, Dios estuvo dispuesto a dar todo lo que tenia porque tu y yo somos importantes para el.

En tercer lugar, somos importantes porque Jesús fue a preparar un lugar para que tú y yo podamos estar con él por la eternidad. Y esta es tal vez la más bella promesa que encontramos en el evangelio de Juan: Cristo esta preparando un lugar para ti, porque anhela que tu, pases la eternidad junto a el.

Cuando pensamos en todo lo que Jesús está preparando allí en el cielo, nos damos cuenta que: “Somos importantes para Dios”; Jesús no quiere que vos faltes en el día en el que el regresara a la tierra, es más esta dispuesto a hacer todo para rescatarte del desierto de este mundo, es por eso que te invito a recordar en esta noche, todo lo que Dios hizo y hace por ti, teniendo la seguridad que todo lo hizo, que todo lo hace, “Porque te ama, pero sobre todo porque eres lo más importante para el”.